¿Qué pasa si el dominio de envío aparece en una lista negra?
Mantener una buena reputación de envío es fundamental para asegurar la entregabilidad de los correos electrónicos. Sin embargo, a veces puede ocurrir que el dominio de envío aparezca en una lista negra, lo que puede tener un impacto significativo en la capacidad de enviar correos exitosamente. En este artículo, exploraremos las implicaciones de aparecer en una lista negra y algunas soluciones para abordar esta situación.
Cuando un dominio es incluido en una lista negra, significa que ha sido identificado como sospechoso o no deseado por uno o varios proveedores de correo electrónico y/o programas anti-spam de servidores corporativos. Cada proveedor o programa tiene su propia lista negra, y la relevancia de estas listas puede variar. El equipo de ICOMM trabaja diligentemente para obtener el delisting de los dominios afectados y restaurar la capacidad de enviar correos a las bandejas de entrada de los destinatarios.
Sin embargo, en lugar de depender únicamente del delisting, es esencial abordar las causas subyacentes que llevaron al dominio a ser incluido en una lista negra. Esto implica mejorar la calidad de los envíos y la gestión de las bases de datos.
La presencia de un dominio en una lista negra está directamente relacionada con una mala calidad en la gestión de las bases de datos. Esto puede deberse a varias razones, como el envío a direcciones antiguas que ya no están en uso o que no muestran interacción con los correos electrónicos enviados. Para evitar que un dominio caiga nuevamente en una lista negra, es crucial mejorar la calidad de los envíos y aplicar políticas efectivas de gestión de bases de datos.
Mejora la calidad de las bases de datos: Examina tu base de datos y aplica políticas para detectar direcciones antiguas o inactivas que no demuestren engagement. Por ejemplo, puedes considerar enviar correos solo a direcciones que hayan mostrado aperturas en los últimos 180 días. Al mantener una base de datos actualizada y con contactos activos, estarás reduciendo las posibilidades de caer en una lista negra.
Segmenta tu audiencia adecuadamente: En lugar de enviar correos masivos a toda tu lista de contactos, considera segmentar tu audiencia en grupos más pequeños y específicos en función de sus intereses y comportamientos. Esto te permitirá enviar contenido relevante y personalizado, lo cual es más propenso a generar interacción y evitar que tus correos sean marcados como spam.
Es importante tener en cuenta que la reputación del dominio es un factor crucial en la entregabilidad de los correos electrónicos. Cada proveedor de servicios de correo electrónico tiene su propio conjunto de reglas y políticas para determinar si un correo se considera spam o no. Un mensaje que pueda llegar a la bandeja de entrada principal de Gmail puede terminar en la carpeta de spam de Yahoo. Por lo tanto, es esencial mantener una buena reputación de envío para maximizar la entregabilidad.
Algunas de las prácticas utilizadas por los proveedores de correo electrónico para gestionar los correos no deseados incluyen:
Throttling: Esta práctica consiste en limitar la cantidad de correos electrónicos que un proveedor acepta de un remitente en un período determinado. Esto puede resultar en retrasos en la entrega de los correos.
Etiquetado como SPAM: Si un proveedor de correo electrónico identifica un correo como spam, lo enviará a la carpeta de spam del destinatario. Esto reduce la visibilidad del correo y disminuye las posibilidades de que sea abierto y leído.
Blacklisting: Un proveedor de correo electrónico puede rechazar los mensajes provenientes de una IP o dominio que considera sospechoso o que ha sido previamente incluido en una lista negra. Esto puede resultar en una falta de entregabilidad para los correos enviados desde esa dirección.
Consulta nuestro articulo: Herramientas para conocer la reputación del dominio de envío
Cuando un dominio es incluido en una lista negra, significa que ha sido identificado como sospechoso o no deseado por uno o varios proveedores de correo electrónico y/o programas anti-spam de servidores corporativos. Cada proveedor o programa tiene su propia lista negra, y la relevancia de estas listas puede variar. El equipo de ICOMM trabaja diligentemente para obtener el delisting de los dominios afectados y restaurar la capacidad de enviar correos a las bandejas de entrada de los destinatarios.
Sin embargo, en lugar de depender únicamente del delisting, es esencial abordar las causas subyacentes que llevaron al dominio a ser incluido en una lista negra. Esto implica mejorar la calidad de los envíos y la gestión de las bases de datos.
La presencia de un dominio en una lista negra está directamente relacionada con una mala calidad en la gestión de las bases de datos. Esto puede deberse a varias razones, como el envío a direcciones antiguas que ya no están en uso o que no muestran interacción con los correos electrónicos enviados. Para evitar que un dominio caiga nuevamente en una lista negra, es crucial mejorar la calidad de los envíos y aplicar políticas efectivas de gestión de bases de datos.
Recomendaciones mantener una buena reputación de dominio
Mejora la calidad de las bases de datos: Examina tu base de datos y aplica políticas para detectar direcciones antiguas o inactivas que no demuestren engagement. Por ejemplo, puedes considerar enviar correos solo a direcciones que hayan mostrado aperturas en los últimos 180 días. Al mantener una base de datos actualizada y con contactos activos, estarás reduciendo las posibilidades de caer en una lista negra.
Segmenta tu audiencia adecuadamente: En lugar de enviar correos masivos a toda tu lista de contactos, considera segmentar tu audiencia en grupos más pequeños y específicos en función de sus intereses y comportamientos. Esto te permitirá enviar contenido relevante y personalizado, lo cual es más propenso a generar interacción y evitar que tus correos sean marcados como spam.
Problemas en la entregabilidad por mala reputación de dominio
Es importante tener en cuenta que la reputación del dominio es un factor crucial en la entregabilidad de los correos electrónicos. Cada proveedor de servicios de correo electrónico tiene su propio conjunto de reglas y políticas para determinar si un correo se considera spam o no. Un mensaje que pueda llegar a la bandeja de entrada principal de Gmail puede terminar en la carpeta de spam de Yahoo. Por lo tanto, es esencial mantener una buena reputación de envío para maximizar la entregabilidad.
Algunas de las prácticas utilizadas por los proveedores de correo electrónico para gestionar los correos no deseados incluyen:
Throttling: Esta práctica consiste en limitar la cantidad de correos electrónicos que un proveedor acepta de un remitente en un período determinado. Esto puede resultar en retrasos en la entrega de los correos.
Etiquetado como SPAM: Si un proveedor de correo electrónico identifica un correo como spam, lo enviará a la carpeta de spam del destinatario. Esto reduce la visibilidad del correo y disminuye las posibilidades de que sea abierto y leído.
Blacklisting: Un proveedor de correo electrónico puede rechazar los mensajes provenientes de una IP o dominio que considera sospechoso o que ha sido previamente incluido en una lista negra. Esto puede resultar en una falta de entregabilidad para los correos enviados desde esa dirección.
Consulta nuestro articulo: Herramientas para conocer la reputación del dominio de envío
Actualizado el: 21/07/2023
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